Flexibilidad: las bicicletas de paseo deben estar preparadas para satisfacer a usuarios con diferentes necesidades, así como para los usos más variados. En definitiva, estas bicis deben ser versátiles y capaces, tanto para desplazamientos a la oficina, ir de compras, disfrutar a baja velocidad al aire libre, etc. Es interesante que vengan equipadas con toda clase de accesorios como luces, guardabarros, portaequipajes, etc. O, al menos, que estén preparadas para instalar o alojar este tipo de equipamientos. Cuando muchos piensan en este tipo de bicis, las relacionan con la típica bicicleta de ciudad con cesta.
Posición cómoda: estas bicicletas son utilizadas por todos los tipos de ciclistas, algunos puede que muy experimentados y acostumbrados a estar muchas horas sobre la bici, pero una gran mayoría las usará en distancias relativamente cortas. Además, la velocidad no suele ser la prioridad, por lo que poder llevar una posición erguida y cómoda tiene todo el sentido, para evitar cualquier tipo de molestia al ciclista.
Simplicidad mecánica: es muy importante que la bici de paseo no necesite estar con excesiva frecuencia en el taller. Habitualmente, estas bicicletas, en las que el peso no es tan crítico como en las bicicletas para carretera o las bicicletas para montaña o MTB, están fabricadas con componentes sencillos pero robustos, que necesitan pocos ajustes y soportan el trato típico de los recorridos urbanos, diarios en algunos casos.
Uso sencillo y facilidad: el perfil del ciclista que usa la bici para pasear requiere que el uso de la bici sea intuitivo, sencillo y fácil. Normalmente, no se requieren transmisiones sofisticadas, como las electrónicas actuales, que demandan una mayor atención por parte del ciclista. La bicicleta eléctrica de paseo es una opción que deberíamos considerar, y que puede ampliar la facilidad, en cuanto a la energía necesaria para mover la bici, incluso con ciertos desniveles. Esto puede ampliar las posibilidades y hacer más accesible ciertos recorridos a muchos ciclistas. Un buen ejemplo de bicicleta urbana con asistencia eléctrica es la Ebike Coluer Creenland, una E-Bike urbana muy aventurera, cómoda, con cuadro de aluminio, guardabarros, luces y horquilla de suspensión, que aumenta ostensiblemente la comodidad.